Tú y yo sabemos que para el que le gusta, Halloween puede ser una fiesta muy divertida. Pero así como es divertida, también puede resultar muy costosa. Si sumas el disfraz, la máscara, la peluca y los accesorios, cuando vienes a ver terminas asustada pero por lo que gastaste.
Para que puedas disfrutar tu disfraz y tu fiesta, sin comprometer tu presupuesto, comparto estas ideas que encontré en el portal Savvy Sugar para que te disfraces con lo que tengas en la casa. Lo único que tienes es que decidir de qué te quieres disfrazar y poner manos a la obra.
Gitana
Todo lo que necesitas es una pañoleta para la cabeza, unos buenos aretes, una falda larga de volantes preferiblemente y unas buenas pulseras. La idea es te hagas un maquillaje bien exagerado con delineador negro en los ojos, que te hagas las interesante y misteriosa, y cargues un mazo de cartas para que le leas la fortuna a tus amigos.
Deportista
Lo único que tendrás que decidir es que tipo de atleta serás: ¿una basquetbolista? ¿Una futbolista? ¿Una boxeadora? Cuando te hayas decidido, echa mano del uniforme de tu novio, marido, hermano o hijo. Y para que el look sea perfecto, no te olvides de llevar los accesorios (pelota, bate, guantes, gorra).
Fantasma
Más fácil imposible. Lo único que necesitas es una sábana blanca vieja y unas tijeras para hacerle unos hoyos a la atura de los ojos. Si quieres ser una fantasmita coqueta, ponle uno poco de blush en las “mejillas” y lápiz labial en la “boca”.
Mimo
Otro disfraz sencillito. Píntate la cara de blanco. Usa sombra y delineador negro en los ojos y una pintura negra o roja en los labios. Adopta una mirada lo más inexpresiva posible. Comunícate con lenguaje de señas y sobre todo con los ijos. Si puedes llevar una rosa roja, tanto mejor.
Momia
Este me encanta, pero atenta con material que vas a usar para cubrir tu cuerpo. Una vez lo hice con girones de tela y no funcionó, así que lo mejor es que recurras a vendas elásticas, blancas.
