En mi país se le conoce como tirarse la pera. En otros países como cortar clases. Pero le digas como le digas, lo cierto es que faltar a la escuela sin razón alguna es un problema serio en este país y uno con el que las escuelas públicas han estado tratando de lidiar por mucho tiempo. Pues recientemente, un distrito escolar en San Antonio, Texas, decidió implementar un nuevo sistema para localizar a sus estudiantes en todo momento por medio de un chip en sus tarjetas de identificación de la escuela.
Aunque muchos estudiantes y sus padres no tienen problemas, hay una gran cantidad que están en total desacuerdo con este nuevo programa y no han tardado en criticarlo.
Yo no estoy muy segura qué pensar. Por un lado, me parece una buena idea para evitar que tantos niños falten a la escuela todos los días. Pero, por otro lado, no me gusta nadita la idea de que justos paguen por pecadores.
Y es que, en el distrito escolar de San Antonio donde se ha implementado el nuevo sistema, no hay manera de que los estudiantes opten no participar. Es decir, no es algo que es solamente para aquellos alumnos con problemas pasados, sino que todos los estudiantes están obligados a usar la identificación escolar con el chip incluído.
Y lo peor del caso es que a los estudiantes no se les permite entrar a áreas como la cafeteria y la biblioteca, a menos que tengan puesta su identificación. Además, tampoco pueden participar en actividades extracurriculares o votar por el rey y la reina de la clase si no traen la identificación.
Esto me parece un poco extremo, la verdad, pero más que nada porque todos tienen que pagar los platos rotos de unos cuantos.
Imagen vía Conspirator/flickr