Muchos seres humanos, han tenido la fortuna de decir, que la vida les regaló una segunda oportunidad. No importa si en algún momento, fueron seres despreciables, cometieron algún crimen o tomaron una decisión equivocada, pues muchos, parecen ser elegidos por el destino, para comenzar de nuevo, y retomar el camino que quizás en algún momento perdieron.
Ésa es la reflexión que me provocó, ver una serie de imágenes que muestran a unas reclusas, recibiendo su título educativo de manos del sheriff del Condado de Harris, Adrián García. Se trata de un programa educativo ofrecido, por primera vez, por el Departamento del Sheriff de este condado, en colaboración con el Houston Community College en sus cárceles. Gracias a éste, se graduaron, recientemente, 30 prisioneras en áreas como sastrería industrial, tecnología de negocios y administración de negocios, como informó el periódico Rumbotx.com.
Pero quizás, el caso que, en particular, me provoca mucha mayor alegría es el de Irma Galarza, una madre soltera, para quien la vida no acabó detrás de esas rejas, sino apenas comenzó. Ella cuenta que aunque extrañaba enormemente a sus hijos estando ahí, decidió hacer un cambio en su vida y tomar la oportunidad de estudiar. Hoy con gran alegría, expresa en una entrevista a este mismo medio, que siente "una gran satisfacción por haber logrado el objetivo". No sólo eso, la oportunidad de haberse superado, a pesar de sus circunstancias, le hizo darse cuenta de que si ella pudo graduarse estando en la cárcel, todo lo que uno quiere ¡es posible!
Afortunadamente, la misión de las instituciones que las apoyaron, no acaba ahí, pues cuando estas prisioneras queden en libertad, la oficina del Departamento del Sheriff y el Houston Community College les brindarán apoyo, para que puedan conseguir trabajo o continuar con sus estudios si así lo desean.
Ojalá que así sea y que el programa se empiece a implementar en otras cárceles, pues no cabe duda, que no hay mejor manera de reintegrar socialmente a los presos, que proveyéndolos de las herramientas que necesitarán, para enfrentarse nuevamente a la vida, partiendo de un enfoque más positivo. Porque, en definitiva, todos merecemos una segunda oportunidad ¿no lo crees?
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Imagen vía Harris County Sheriff's Office
