La gente piensa que estoy loca cuando digo que yo como chocolate TODOS los días de mi vida. No es que me atasque de chocolates, pero me como por lo menos un pedacito de chocolate, preferiblemente amargo u oscuro. Estoy casi convencida que esto es algo que le heredé a mi padre, quien también era amante del chocolate. Nunca me he sentido muy culpable por mi adicción y ahora que me entero que los amantes del chocolate somos más flacos, pues ¡menos!
Sí, así como lo lees. Resulta que un estudio de la Universidad de California-San Diego ha descubierto que el indice de masa corporal (IMC) de las personas que comen chocolate cinco veces a la semana es un punto más bajo que el de aquellos que no lo comen con regularidad.
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Cabe mencionar que las personas involucradas en el estudio–más de mil hombres y mujeres–en promedio, hace ejercicios 3,6 veces a la semana y comen una dieta nutritiva y balanceada. Es decir, no se trata de que te atragantes de chocolate, no hagas ejercicios y tragues lo que sea cada vez que te sientes a la mesa.
Este estudio se añade a otros que ya habían encontrado que comer chocolate amargo (o negro) puede ser beneficioso para el corazón ya que en más de 100 mil personas esta práctica redujo su riesgo de sufrir de enfermedades cardíacas por un tercio. Por eso muchos expertos recomiendan que junto con el ejercicio, no tiene nada de malo que te comas un pedacito de chocolate oscuro como parte de tu dieta.
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A mi me parecen excelentes noticias por lo que pienso seguir comiendo este maravilloso regalo de los dioses sin sentir ni una pizca de culpabilidad.
¿A ti también te gusta el chocolate? ¿Qué crees de este estudio?
Image via anjuli_ayer/flickr
