Patrocinado por Noom
Noche de brujas, la celebración más aterradora del año, pero no por los disfraces, sino por lo difícil que resulta mantenerse saludable en época de Halloween, cuando se tienen tantos dulces a la mano. Y es que, por lo general, en el mes de octubre, tanto niños como adultos acuden a más de una fiesta de disfraces, donde abundan las golosinas, las galletas, la cidra, el chocolate caliente, y muchas otras delicias que son toda una tentación. ¿Cómo podemos seguir disfrutando sin que nuestra salud sufra repercusiones? ¡Aquí te damos unos consejos!
El primero, y más importante de todos, es mantenerse seguro durante la noche de Halloween. Es preciso que durante estas fiestas, tengas un plan de seguridad para tus niños, que incluya llevar linternas o ropa fosforescente para que puedan ser vistos fácilmente durante la noche, que vayan siempre en grupo, que caminen de cara al tráfico y solo por lugares iluminados, que no entren a las casas, que tengan cuidado con las decoraciones que contengan velas, y que no coman dulces hasta que los hayas inspeccionado.
Una vez claro, el protocolo de seguridad, es hora de hablar de las maneras de mantenerse saludable en época de Halloween. Recuerda que siempre puedes recurrir a programas de apoyo como Noom, que te ayudarán a mantenerte en forma, en cualquier momento del año.
Planifica una ruta que requiera caminar más
Busca un vecindario cuyas casas estén más separadas las unas de las otras para que caminen más y para que los niños no recolecten tantos dulces. Si vives en un vecindario con casas muy pegadas, puedes establecer con ellos que el "truco o trato" lo hagan cada cinco casas. Con eso, asegurarás que todos hagan más ejercicio, se cansen más pronto, y no lleguen a casa repletos de dulces. Incluso puedes establecer una meta de pasos y contarlos con ayuda de apps, como la que ofrece el programa Noom. Si llegan a la meta, cada uno puede ganarse un premio.
Compra calabazas o cubos de plástico más pequeños.
Busca una calabaza más pequeña para que los niños recolecten sus dulces. De esta forma sentirán que tienen más dulces y llenarán su cubo de plástico más rápido. Otra cosa que puedes hacer para disminuir el consumo de dulces es separar discretamente aquellos que sabes que son sus favoritos y guardarlos en un lugar lejos de su alcance. De esta forma, cuando lleguen a casa, no comerán tantas golosinas y tú podrás tener un "banco" de dulces para cuando necesites darles un premio. El beneficio de esta técnica, para ti también, es que no tendrás tantos dulces en casa y podrás mantenerte saludable en época de Halloween.
Establece un sistema de rewards.
Si tus hijos son más grandes, no será tan fácil aplicar la técnica anterior. Por eso, es importante que hables con ellos sobre los beneficios de no comer todos los dulces en un mismo día. Hazlos ver que si tienen una reserva de dulces, pueden acceder a ellos durante todo el año y los disfrutarán mucho más. Además, puedes establecer un sistema de rewards para toda la familia, en el que, por ejemplo, si tu niño comió todos sus vegetales durante toda la semana, se puede ganar uno de sus dulces favoritos; o si tú vas al gimnasio un mínimo de tres veces a la semana, también te ganas uno. ¡No hay nada mejor que poner el ejemplo!
La noche de Halloween, planea un menú equilibrado.
Según la pediatra Consuelo Pardo, de la Asociación Colombiana de Nutrición Clínica, la cantidad de azúcar recomendada al día para un niño es de 25 gramos, lo que equivale a tres chocolates pequeños o seis gomitas. De ahí, es una buena idea planear un menú equilibrado ese día para toda la familia. ¿Cómo hacerlo? Puedes apoyarte de programas como Noom que te enseñen a distribuir mejor los alimentos durante el día y te indiquen las porciones ideales según tu edad, peso, y género. Con esta información puedes crear un menú más balanceado, que te permita a ti y a tu familia darse el lujo de consumir un par de dulces en Halloween.
Donar siempre es una buena idea.
Si notas que tener un banco de dulces en casa sigue siendo una gran tentación, lo mejor que puedes hacer es donarlos. No solo te harás un bien, sino que le regalarás una sonrisa a alguien más y les estarás enseñando a tus hijos el valor de la generosidad y la solidaridad. Habla con ellos sobre las razones de donar y elijan una institución de caridad, como Operation Gratitude, Soldiers’ Angels o Operation Shoebox, las cuales envían dulces a los veteranos.
¡No te dejes llevar por las ofertas!
Si eres de las que le hace ilusión regalar dulces la noche de Halloween, intenta no caer en la tentación de comprar bolsas grandes, aunque se encuentren en una excelente oferta. Compra bolsas de dulces más pequeñas y si puedes, intenta sustituir las golosinas por pegatinas, botecitos de burbujas, lápices de colores o pulseras fosforescentes. A los niños les encanta, y tú no tendrás que llenarte de dulces. Otra cosa que puedes hacer es comprar golosinas más "saludables", como gomitas bajas en azúcar, chocolate oscuro, paquetitos de frutos secos, chips de frutas deshidratadas, etc.
¡Ah! Y si tienes fiestas de Halloween adicionales, no olvides esto.
Si tienes una fiesta adicional de Halloween, puedes hablar con tus amigos (o amigas) para que consideren opciones saludables en el menú. Pueden ofrecer frutas o vegetales con figuras de Halloween, aguas frescas, y snacks saludables como rice cakes, barritas de cereal, galletas de avena o frutas horneadas. El programa Noom, por ejemplo, te ofrece una variedad de ideas para hacer snacks saludables como: Patatas dulces crujientes, Pizzas de pita o Rollitos de banana y nutella. Recuerda que el objetivo es mantenerse saludable en época de Halloween.