Anastasia Pokreshchuk, una mujer de Ucrania se encuentra obsesionada con las inyecciones de relleno para sus mejillas, que según ella son "las más grandes del mundo". Su apariencia ha ido cambiando hasta quedar irreconocible y lo más insólito es que muchas veces es ella misma quien se aplica estos tratamientos a base de ácido hialurónico en varias zonas del rostro, sin temor a las graves consecuencias que esto le pueda traer para su salud.
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La mujer no solo ha ganado popularidad en las redes con su transformación, que para algunas personas parece exagerada, sino que su hazaña la llevó a aparecer en el programa de televisión británico This Morning, donde habló de su afición por los rellenos faciales. Anastasia explicó por qué no le da miedo hacerlo ella misma y confesó cómo esto ha sido favorable a su autoestima, mejorando incluso su vida romántica.
¿Lo más increíble? Ella dice que no es suficiente y que quiere ir por más. Independientemente de los consejos de su madre y de las advertencias de un especialista sobre el riesgo de contraer infecciones peligrosas, la joven está dispuesta a seguir en su afán de agrandar sus pómulos, labios y cambiar mediante procedimientos estéticos.