Mi esposo es excelente siguiendo instrucciones. Le gustan las reglas claras y se estresa cuando se las cambian. El pobre se garantizó estrés de por vida cuando se casó conmigo. A mí me encanta experimentar, empujar los límites y soy de las que no hago caso, a menos que no pueda evitarlo. Ahora que estoy más grande ya no soy más rebelde sin causa, pero me pongo creativa con las cosas de la casa.
Mi nueva locura es usar cosas de las tiendas de oficinas en el hogar. Hay algunos de estos productos que se me han hecho perfectos para mantener el orden en la casa. Ya verás a qué me refiero.
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Porque quién dice que tenemos que usar lo que nos venden exáctamente cómo nos lo venden. Nadie ¿Verdad? Prepárate porque estoy segura que te vas a preguntar varias veces cómo fue que no se le ha ocurrido a nadie mover estas cosas a la sección de hogar.